Una vez que el periodo de adaptación se ha acabado es momento de ir empezando a hacer cositas en el aula (decorando espacios y tomando conciencia de que somos un grupo)
Esta mañana hemos recibido una carta sorpresa, hemos visto de qué color era el papel de la carta y hemos pensando en quién podría querer escribirnos y porqué.
Al abrirla hemos descubierto que la persona que nos escribía era el "hada del bosque" y este hada nos ha planteado un problema y es que... ¡Nuestra clase aún no tenía nombre! El hada nos había dejado también unas fotos de unos animales suyos del bosque para que decidiésemos entre todos qué animal queríamos para nombrar nuestra clase.
Teníamos dos opciones:o ser ardillas o ser osos. Como es difícil ponernos todos de acuerdo hemos llevado a cabo una votación. Cada niño ha elegido el animal que más le gustaba y he ido anotando su respuesta en la pizarra.
Con las votaciones conseguimos afianzar la personalidad, al ser capaces de expresar nuestros propios gustos a un grupo; tomamos decisiones por nosotros mismos y... al acabar de votar trabajamos el conteo y la numeración.
nuestro caso, como muchas veces pasa en la vida real, ha dado la casualidad de que hemos tenido unas votaciones muy reñidas y es que se ha producido un empate entre los partidarios de llamarnos la clase de las ardillas y los partidarios de llamarnos la clase de los osos. Al final, para poder desempatar (ya que nos ha quedado claro que no podíamos tener dos nombres), hemos hecho un sorteo cantando la canción de pito, pito, colorito... ¡Y ha salido la ardilla!
Nos hemos quedado muy contentos con nuestro resultado y lo hemos celebrado viendo una canción de ardillas en la pizarra digital y, antes de irnos a casa, le hemos escrito al hada del bosque en la pizarra que hemos decidido llamarnos clase de las ardillas. Estaremos pendientes por si vemos aparecer alguna en el cole durante los próximos días. ¡Os seguiremos informando!
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